La Autoridad Portuaria de Baleares está recogiendo los testimonios directos de los últimos fareros de las Islas

La Autoridad Portuaria de Baleares está recogiendo los testimonios directos de los últimos fareros de las Islas

Palma de Mallorca

09/01/2013

La Autoridad Portuaria de Baleares (APB) está recogiendo los testimonios de los últimos fareros de las Islas con la realización de una serie de entrevistas en vídeo a personas que tienen o han tenido una relación directa con este tradicional oficio. Con la puesta en marcha, hace unos años, del portal web www.farsdebalears.com, la APB expone al público, a través de la red, varias entrevistas a ex fareros o familiares que cuentan en primera persona sus vivencias directas con los faros.En la última entrega de estas entrevistas, el director del Jardín Botánico de Sóller, Josep Lluís Gradaille, explica como su infancia y adolescencia en el faro del sa Creu del Puerto de Sóller -donde su padre ejerció de farero-, marcó su madurez y su relación directa con la naturaleza y su forma de entenderla. En su blog personal, el presidente de la APB, José Mª Urrutia, afirma que esta iniciativa de recoger los testimonios de los último fareros de las Baleares persigue “el firme propósito de preservar para generaciones venideras la memoria viva de sus protagonistas y sus experiencias” a consecuencia de que en la Ley de Puertos y de la Marina Mercante de 1992 se declaró a extinguir el Cuerpo de Técnicos Mecánicos de Señales Marítimas.Entre otros testimonios que han sido recogidos por la APB figura el de Pere Bonet, el último farero de Portopí, el tercer faro en funcionamiento más antiguo del mundo, la historia de Santi Ribas, que heredó el oficio de su padre Jaume, farero del Botafoc, en el puerto de Eivissa o las calamidades por las que pasaban los fareros aislados en la Isla del Aire, en Menorca.Otros testimonios que están en producción y serán publicados en breve en www.farsdebalears.com son el regreso al faro de n’Ensiola, en la isla de Cabrera, del ibicenco Mariano Juan, veinte años después de su jubilación y las anécdotas de Bernat Reus en sa Dragonera, la isla de los tres faros.