Lluc Julià: 'La refotografía es válida tanto para denunciar el paisaje que hemos dañado como para reivindicar lo que hemos sabido conservar'
24/10/2022Lluc Julià Fàbregues (Barcelona, 1969) es diseñador gráfico especializado en contenidos editoriales. Desde 2003 se dedica a plasmar el cambio experimentado en las islas en el último siglo a través de refotografías, una técnica consistente en repetir una fotografía desde un mismo lugar, con un espacio de tiempo entre imágenes, constituyendo así un documento del ayer y del hoy de un área en concreto. Con motivo del 150º aniversario de la APB se ha encargado de dejar para la historia una colección de refotografías de los puertos y faros de un tiempo y de hoy. ¿Cómo surge la idea de realizar estas refotografías? La idea nació al ver el libro de refotografía Voyage en Inde que el italiano Antonio Martinelli realizó en base a unos grabados de templos hindúes de la época de la dominación británica en la India. Me pareció que era una manera genial de ilustrar el estado del patrimonio de un lugar y espacio determinados. Posteriormente conocí el Die Balearen, la obra del archiduque Luis Salvador de Austria, y pensé que era una oportunidad perfecta para aplicar la técnica de la refotografía. El no saber hasta qué punto los grabados son fieles a la realidad me creó dudas iniciales. Pero enseguida comprobé que la filosofía enciclopedista del archiduque revela las pocas licencias artísticas que se permitió, como pueden ser, en algún caso, pequeñas modificaciones de la escala y la perspectiva o el añadido de algún elemento baladí. Otro aspecto que valoro de este proyecto es dar visibilidad a la obra del archiduque por encima de su personaje. ¿En qué te fijas para realizar estas composiciones tan cuidadosas? Una vez localizado el lugar exacto desde donde se captó la imagen original, lo que no siempre es posible, existen tres elementos esenciales a tener en cuenta: la perspectiva, el encuadre y la hora solar. No siempre es posible respetarlo todo, pero cuanto más te acerques, mejor será el resultado. ¿Cómo es el proceso de localización de los espacios? En primer lugar intento localizarlos desde casa con Google Maps. Este es un primer filtro que me permite ver posibilidades y descartar refotografías imposibles o muy complicadas. En este momento también es importante intentar ver si la imagen original está hecha por la mañana o al atardecer, para poder ir a una hora donde la luz sea lo más aproximada posible a la del original. Con esta tarea previa puedes afrontar el trabajo de campo con mucho trabajo realizado y más posibilidades de éxito. Sin embargo, a la mayoría de localizaciones he tenido que ir más de una vez, ya sea por un error con la perspectiva, con la hora solar o por mal tiempo, que esto también ocurre a menudo... Empezaste a hacer refotografías en las islas en base a los grabados del Die Balearen y ahora lo has hecho en base a fotografías antiguas para la APB. ¿Qué te ha sorprendido más de lo que has conocido? Hay muchos aspectos que ya esperas cuando comparas presente y futuro como es, por ejemplo, el crecimiento urbanístico. En cambio, lo que más me ha sorprendido es cómo la vegetación ha ganado terreno. Tanto en los grabados del archiduque como en las fotos antiguas se ven unas islas peladas, sin prácticamente vegetación. Muchos de los paisajes del Die Balearen no los he podido realizar porque la vegetación me ha impedido el acceso al punto exacto o me ha tapado totalmente la perspectiva. En general, ¿los paisajes han mejorado o empeorado? Estos proyectos son válidos tanto para denunciar el paisaje que hemos dañado como para reivindicar lo que hemos sabido conservar. Este aspecto puede aplicarse también para el patrimonio arquitectónico. Lo que me motiva de la fotografía es el hecho de crear herramientas para tomar conciencia, de forma atractiva, comprensible e incluso lúdica, del efecto que produce la huella del ser humano sobre el propio entorno, especialmente sobre el patrimonio natural y cultural de las Islas Baleares. Un lugar que te emocione. No sabría decirte un lugar concreto de los que haya refotografiado que me emocione especialmente. Lo que sí te puedo decir es un momento emocionante: Cuando encuentro el sitio exacto desde donde está hecha la imagen original y pienso en la persona que estuvo allí hace 100 años o más captándola desde el mismo lugar. Este tipo de proyectos es posible gracias a la tecnología. ¿Los dispositivos electrónicos sustituirán al papel? ¿Eres de ebook o de libro? La tecnología ayuda muchísimo a realizar este tipo de proyectos y es admirable cómo se pudo hacer una obra tan bien hecha como el Die Balearen con los medios técnicos de la época. Lo indudable es que la tecnología actual nos da la oportunidad de hacer llegar lo que hacemos a muchísima gente con muy poco esfuerzo. Personalmente creo que los dispositivos electrónicos y el papel son complementarios. En muchos aspectos los móviles han sustituido al papel, pero no creo que lo hagan desaparecer. Yo leo tanto ebooks como libros físicos, pero prefiero el papel. Soy diseñador gráfico especializado en diseño editorial y de contenidos y me gusta tener un libro bien editado en mis manos. En este aspecto, por ejemplo, el ebook tiene muchas limitaciones.